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Hace tres semanas la periodista de la localidad bonaerense de Mercedes, Andrea Dematey denunció ante la policía amenazas y un operativo de amedrentamiento realizado por agentes municipales en su domicilio particular. Hasta el hogar de Dematey se acercaron tres camionetas y tres motos oficiales de Control Urbano, con un total de nueve agentes para “entregar una notificación”. La patota del intendente alineado al massismo, Carlos Selva, atacó contra la dueña del diario Actualidad de Mercedes.
La primera medida del jefe comunal perteneciente al Frente Renovador fue amenazar a la periodista y a su pareja. No obstante, luego de que pasaran tres semanas de la denuncia realizada por Dematey, Carlos Selva volvió por más y realizó un nuevo ataque a la libertad de expresión.
Desde el municipio formalizaron los aprietes, amenazas e intimidaciones de la patota de Selva y se decidió “cortar la pauta» y se bloqueó la distribución del diario Actualidad de Mercedes. Este nuevo ataque contra el periódico y su directora fue oficializado por el director de Prensa, Protocolo, Ceremonial y Relaciones Institucionales del municipio que encabeza Selva, del Frente Renovador.
“Por razones políticas” se bloqueó la distribución del diario resaltó Dematey y agregó que es víctima de un «hostigamiento continúo por parte de los inspectores de tránsito de la Municipalidad».
El secretario de Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires, Guido Carlotto, brindó su apoyo a las víctimas del ataque de la mafia del intendente massista. En ese sentido, el funcionario exhortó a las autoridades de Mercedes a «apegarse sin grises a la responsabilidad política e institucional que los mercedinos les delegaron; deben garantizar los derechos y libertades no sólo para el ejercicio periodístico, sino para la realización integral de la comunidad y no descuidar ninguno de los aspectos que dependen de su competencia, que es enorme».